¿Te has preguntado alguna vez cuál es la piedra preciosa que más va contigo? Desde el principio de los tiempos de la humanidad las piedras preciosas han excitado la imaginación del hombre. Todas las culturas les han otorgado propiedades mágicas, considerándolas poderosos talismanes y símbolos de poderes ocultos. Se les dio un valor que iba más allá de ser meros objetos de embellecimiento y con el tiempo se convirtieron en moneda de cambio, objeto de lujo y símbolos de riqueza y opulencia.
Las piedras preciosas en la Antigüedad
La ambición de poseer una piedra preciosa se inspira tanto en la fascinación que ejerce su belleza, como en su escasez o el deseo de tener el poder, la elegancia o el glamour que proporcionan. Cuando piedras preciosas como el jade, la turmalina, los zafiros y rubíes fueron conocidos por primera vez en la Antigua Grecia, la imaginación helénica, enamorada de las simetrias y la belleza de aquellos objetos de la naturaleza, asimiló cada piedra con un mes y un signo del Zodíaco. Se fue asentando la creencia de que llevar la piedra correspondiente al mes de nacimiento otorgaba una protección especial, mágica.
Con el tiempo un primer calendario de las piedras preciosas que corresponden según mes quedó así:
Enero, mes de jacinto o circonio
Febrero, mes de la amatista
Marzo, mes del jaspe
Abril, mes del zafiro
Mayo, mes del ágata
Junio, mes de la esmeralda
Julio, mes del ónice
Agosto, mes de la cornalina
Setiembre, mes del crisolito
Octubre, mes del berilo
Noviembre, mes del topacio
Diciembre, mes del rubí.
Las piedras preciosas por mes y su significado
Esta lista fue variando con el paso de los siglos al ir difundiéndose más el uso de nuevas piedras preciosas como el ópalo, el diamante o las perlas, muy populares en la Europa moderna.
Como consecuencia comenzaron a circular nuevos calendarios, entre ellos, éste que varía la correspondencia por mes e introduce nuevas piedras preciosas:
Enero, mes del granate. Piedra asociada a la creatividad, la imaginación y la comunicación. Se recomienda para evitar depresiones y tener un ánimo positivo.
Febrero, mes de las perlas. Son símbolos de la pureza, la humildad y la sencillez.
Marzo, mes del ónice. Se supone que otorgan fuerza espiritual y física y ayudan a controlar las emociones.
Abril, mes del diamante. Es símbolo de la perfección, la pureza y amuleto contra todo tipo de mal.
Mayo, mes de la esmeralda. Es la piedra de la prosperidad, la sabiduría y el amor.
Junio, mes de la amatista. Piedra protectora que ayuda a la clarividencia, calma las emociones intensas y ahuyenta a negatividad.
Julio, mes del rubí. Es conocida como la piedra del éxito y la salud. Ayuda a canalizar la energía positiva.
Agosto, mes de la aguamarina. Es la piedra de la felicidad y la alegría.
Setiembre, mes del zafiro. Es la piedra de éxito, la fama, la intuición y la sabiduría. Tiene poderes curativos.
Octubre, mes del ópalo. Está considerada la piedra de la esperanza y se tiene por amuleto protector de todos los males.
Noviembre, mes del topacio. Es la piedra de la simpatía, la sociabilidad y el optimismo. Se aconseja utilizarla cuando se comienzan nuevas relaciones, nuevos trabajos o proyectos.
Diciembre, mes de la turquesa. Símbolo de la abundancia, se la considera un amuleto único para protegerse del mal de ojo y atraer la suerte y la amistad.
Sea cual fuera la piedra preciosa que te corresponda, lo más importante es que realmente sea la que te guste, tanto para lucir como para regalar. El auténtico valor de una joya es el que tú le acabes dando. ¿A tí qué te parece? ¿Coincide la piedra de tu mes con la que más te gusta?
No hay comentarios:
Publicar un comentario