Si a veces sientes que tu pareja se comporta de forma violenta contigo pero realmente no puedes definirlo, quizás estés con alguien pasivo-agresivo.
El Centro Médico de la Universidad de Nueva York define a las personas pasivo-agresivas como “alguien que parece actuar apropiadamente, pero en realidad es muy negativo y se resiste pasivamente”.
Además, los médicos explicaron que quienes tienen estos comportamientos comparten algunas características: son poco razonables, es incómodo relacionarse con ellos, casi nunca expresan su hostilidad de forma directa y repiten sus acciones con el tiempo.
Si tu novio hace estas cosas, probablemente necesite ayuda:
Nunca es su culpa
No importa lo que haya hecho, siempre encuentra la forma de ponerse en el lugar de la víctima. Por ejemplo, si llegó tarde a una junta del trabajo hallará una manera de culpar a alguien más por eso. Y que no se te ocurra confrontarlo porque terminarás siendo la mala.
Su humor es agresivo
Hace bromas que incomodan a los demás. Se burla de las personas por su apariencia, condición social o relaciones y se excusa simplemente diciendo “es broma”.
Aplica la ley del hielo
Ya sea a ti o a alguno de tus amigos, pero puede llegar a ignorar la existencia de una persona por mucho tiempo. También es capaz de excluirte de sus actividades mientras muestra lo genial que se la está pasando.
No cumple con sus obligaciones
Si vives con una persona así, es posible que te encuentres haciendo más de lo que te toca. Por ejemplo, le pides que por favor lave los trastes y no te dará una negativa, pero simplemente no lo hará y su pasividad te obligará a hacerlo.
Intenta hablarlo, pero si tu pareja no está dispuesta a escuchar o a buscar ayuda, considera terminar.
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